La siguiente nota le pertenece a la activa
página Castellano.org. Creo que es bueno compartirla. En este artículo me
terminan de aclarar la historia de una frase muy común en a conversación
coloquial de mi país. Por lo que deduzco, la frase de marras es de uso
generalizado en el habla castellana en general. Pues como no lo sabía, "queda a pelo" que yo de esta letra no sabía "ni
jota" del tema.
LA JOTA
La letra jota no existía en el alfabeto romano,
en el que se confundía con la "i"; y ambas están emparentadas en tal
medida que la letra jota se pronuncia como "i" en el alemán moderno y
en otras lenguas. La jota fue introducida en la imprenta por tipógrafos
holandeses y llegó al español de la mano de uno de ellos, Pedro Ramus, razón
por la cual hasta algunas décadas atrás, muchos la llamaban "jota de
Holanda".
Sin embargo, los holandeses no inventaron la
jota; la tomaron de la iota griega, que provenía, a su vez, de los alfabetos
hebreo y caldeo, en los cuales era la letra más pequeña, de donde surgió la
expresión "no sabe ni jota", que equivale a "no sabe nada, ni la
letra más pequeña".
ACOTACIÓN:
Para no quedarme solo con la nota, agrego lo
que de esta letra dice el Panhsipánico
(2005):
Undécima letra del abecedario español y décima
del orden latino internacional. Su nombre es femenino: la jota (pl. jotas).
Representa el sonido consonántico velar fricativo sordo /j/. Esta pronunciación
es la normal en los dialectos del centro, este y norte de España y en varias
regiones de Hispanoamérica. Pero en los dialectos meridionales de la España
peninsular, en Canarias y en amplias zonas de Hispanoamérica, existe una
tendencia generalizada a la aspiración de este sonido: [muhér, hamón, tehádo]
por mujer, jamón, tejado. El sonido /j/ lo representa también la letra g ante
e, “I”. En algunos nombres propios y sus
derivados, se usa la grafía arcaica “x”.